No sé si tendrás una autocaravana o no, o si vivirás en ella, pero cuando empecé a decirle a la gente que pensaba comprarme una pasaron dos cosas: el 50% de mis amigos empezaron a señalarme con emoción todas las autocaravanas o campers que veían por la calle, sin excepción, y el otro 50% me contestó que eso no era tener una vida real y que qué suerte (nótese la ironía) porque la mayoría no podía dejar todo como si nada e irse a dar vueltas por el mundo.
Luego vi Nomadland y dejé de sentirme tan incomprendida, porque hay varios personajes que aparecen a lo largo de la película que tampoco entienden las decisiones de la protagonista.
Por todo esto, últimamente no hago más que pensar en cómo le puedes explicar a los demás tu decisión sin que te molesten de por vida.
Sea como sea la gente de tu alrededor, en muchos casos no entenderán que vivas en una casa con ruedas. ¿Qué puedes hacer para que comprendan tu punto de vista? Empezamos por lo básico, que vean cómo es la vida en una casa con ruedas y, luego ya, los mejores argumentos para explicar tu decisión.
¿De qué vives en una autocaravana?
Sobre esto podríamos escribir no uno, sino decenas de artículos sobre el estilo de vida, el día a día y cómo conseguir resolver X o Y problema financiero, pero vamos a centrarnos en lo básico que se pregunta todo el mundo: el trabajo.
Aunque la opción de ser millonario y no tener preocupaciones económicas sabemos que existe, no es la más realista ni extendida, así que pasemos a otra cosa.
La segunda opción más famosa y que todos aspiran conseguir es la de ser un creador de contenido de éxito y ganar dinero por postear su vida, pero esto tampoco es tan común ni sencillo como puedas imaginar.
Lo mejor es que la gente vea que los que tienen este estilo de vida suelen trabajar o, como dicen algunos, “traviajar”.
¿Trabajar en una camper? ¿Cómo? Aquí sí que hay miles de opciones. Los hay que trabajan por temporadas, según donde estén, y ahorran lo posible para luego tener más meses de vacaciones y poder viajar al máximo. Mis favoritos son una pareja de australianos fisioterapeutas que ofrecen sus servicios allá donde estén.
Si no, también hay muchas personas freelance que escriben, diseñan o trabajan para cualquier empresa que les permita hacerlo en remoto. Sin duda, esto último está cada vez más de moda así que poco a poco las posibilidades de lanzarse a un viaje por carretera interminable son más altas.
¿Cómo se lo explicas a la gente?
Aunque no es sencillo, hay algunas reflexiones que he oído estos días que me han parecido una buena forma de empezar a allanar el camino, como la frase de Nomadland que dice: “Tengo donde vivir, lo que no tengo es una casa. No es lo mismo, ¿no?”. Creo que es un buen argumento para los más asustadizos, los que se preocupan de que estés bien.
Para los más conservadores, María José y Andrés, de Nomade.2, explican que “hoy en día vivimos en una época donde no hay seguridad de ningún tipo. Si no disfrutamos el día a día ¿entonces qué? ¿Quién te asegura que llegarás a la jubilación o cobrarás algo para entonces? Quizás todo sale bien, ojalá, pero preferimos tomar el toro por los cuernos.” Me pareció un argumento sensato recurrir a la incertidumbre y a que, realmente, cualquier cosa puede pasar, tanto para lo bueno como para lo malo, así que mejor aprovechar el tiempo.
Y para aquellos más emotivos, a los que tienes que convencer con sentimientos, lo mejor es justificar tu postura con la bonita frase de que el hogar no es un lugar, sino que es algo que llevas contigo.
¿Hay fecha límite para este estilo de vida nómada?
La pregunta del millón, la de “ok, entiendo cómo te vas a mantener y por qué has tomado tu decisión, ¿pero cuánto va a durar esta tontería?”
Como aquí para gustos los colores, os comparto las opiniones de algunas personas que viven en autocaravanas o campers y hemos entrevistado en nuestro podcast de ¡Rodando Voy! Allá van posibles respuestas:
- “Es muy probable que algún día no quiera vivir en una camper, pero de momento sí quiero, porque es lo que me hace feliz.” En este caso, aunque no sabes cuándo volverás, dejas claro que no lo descartas, lo cual siempre ayuda a calmar los nervios, al menos por un rato.
- “Cuando cumpla mi objetivo”. Este puede ser visitar X países, recorrer tantos kilómetros o vivir ciertas experiencias vitales antes de volver a la vida sedentaria. Con esta respuesta no das una fecha exacta, pero la gente se queda más tranquila sabiendo que tu momento de retorno es más o menos calculable.
- “No voy a volver a mi vida anterior, porque estoy muy seguro/a de mi decisión y es lo que me gusta”. ¡Qué respuesta y decisión más valiente! Sin duda, lo mejor de decir esto es que preguntarán con menor asiduidad cuando vuelves (lo que no quiere decir que no vayan a hacerlo, ojo).
Todavía no me he visto con corazón para tomar la decisión de vivir en una camper, aunque cada día falta menos, pero sé que lo primero que haré será hablar con los míos para poder contar con su apoyo.
¿Recuerdas cómo fue el día que le contaste a tu familia y amigos que te comprabas una autocaravana o te mudabas a una? Escríbenos a info@autocaravanas.es ¡Nos encantaría saber cómo fue!
