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Eslovenia en autocaravana (II)

En la segunda parte de nuestro viaje en autocaravana por Eslovenia nos adentramos en el Valle del Soca, donde realizamos rafting en su famoso río homónimo, una de las aventuras más impresionantes del viaje. Tras pasar por el bello pueblo de Bovec, finalizamos nuestra ruta en Kobarid, localidad conocida por las cascadas Kozjak y su relación con la I Guerra Mundial.

Etapa 7: Navegamos hacia la única isla eslovena

Por la mañana temprano nos acercamos hasta las inmediaciones del lago Bohinj, nuestra idea era subir primero a la cascada Savica, pero, durante los meses de verano, está restringido el tráfico de la carretera de acceso a la cascada y no se permite el tránsito de autocaravanas, así lo dejaban claro las señales que encontramos en la calzada, así pues, optamos por cambiar de plan e ir al Vogel ski center en Orlova Glava.

Dejamos la autocaravana en el parking de la estación de ski, justo donde se encuentra el primer funicular. El parking es gratuito y si llegáis a buena hora encontraréis sitio sin problema. Lo primero, como decimos, es tomar el funicular que te lleva a 1.537 metros de altitud, las vistas son indescriptibles, no aptas para personas con vértigo. La subida es impresionante y las vistas del lago Bohinj nos dejaron sin aliento.

Una vez arriba, se puede tomar un telesilla que te sube hasta Orlova Glava, a 1682 metros de altitud. Y para aquellos que quieran seguir subiendo, hay numerosos itinerarios para hacer a pie, unos más escarpados que otros, nosotros tomamos uno de los caminos y, aunque no íbamos demasiado preparados en cuanto a calzado, conseguimos subir a otro de los puntos panorámicos que nos ofreció una de las vistas más impresionantes del Parque Nacional del Triglav.

Etapa 8: Las estaciones de esquí son también para el verano

Nuestro objetivo era llegar pedaleando al Planika Nordik Center, que es donde se ubican las pistas de saltos de ski. Con un poquito de esfuerzo, logramos llegar a las instalaciones deportivas, que, aunque en esta época, no tienen nieve, resultan impresionantes, ya que permiten observar las altitudes desde donde tienen que saltar. 

  • Reserva Natural Zelenci

De camino a la población paramos en el sendero que lleva hasta la Reserva Natural Zelenci. El camino hay que hacerlo a pie y transcurre por un tupido bosque. Hay otra forma de acceder a los lagos que es dejando el vehículo en un aparcamiento a pocos kilómetros de Kransjka Gora.

Lo interesante de este lugar es la riqueza de la flora y la fauna. No está permitido el baño en esta zona, pero nos bastó con contemplar estas lagunas de aguas subterráneas que emergen a la superficie.

Etapa 9: Carreteras de infarto y bosques encantados

Retomamos la ruta a primera hora con la intención de ir hasta el Valle del Soca, atravesando la carretera panorámica que nos llevaría hasta el paso Vrsic que es el puerto más alto de toda Eslovenia. Afrontamos el reto de superar las 50 curvas de 180º y los 9 km de infarto. 

En esta carretera, merece la pena hacer una parada en la Ruska Kapelica, una capilla de madera que se construyó durante la I Guerra Mundial en recuerdo de los prisioneros rusos que murieron tras un alud mientras construían la carretera.

Tras las sinuosas carreteras, llegamos al pueblo de Bovec. Nos encantó el ambiente de sus calles, y todas las propuestas de ocio que nos ofrecía. Pudimos pasear un poco por allí y contratar una de las actividades que llevábamos esperando durante casi todo el viaje: bajar haciendo rafting por el Río Soca (lo dejamos todo planificado para el día siguiente)

Uno de los atractivos de Bovec es también su gastronomía, no os podéis marchar sin probar sus quesos, el secreto lo tienen las ovejas autóctonas y el proceso artesanal de la fabricación de los quesos. ¡Una maravilla!

Etapa 10: Rafting en el río turquesa

Este día estábamos nerviosos porque íbamos a descender por el río Soca, pero como la actividad era por la tarde, nos dirigimos a las instalaciones de la empresa organizadora para pedir permiso para estacionar allí el vehículo y poder aprovechar la mañana visitando la cascada Boka.

Nosotros pudimos ir andando, pero hay un parking junto al hotel Boka donde podréis estacionar vuestro vehículo. Esta cascada es muy impresionante por la altitud que tiene, el salto de agua es de 106 metros de altura. 

  • Rafting por el río Soca

El Río Soca era uno de los motivos por los que habíamos elegido este año Eslovenia para nuestras vacaciones. Habíamos visto muchas imágenes de este río turquesa, como sacado de otro mundo. A la hora acordada ya estábamos dispuestos para afrontar nuestra actividad más extrema durante el viaje a Eslovenia.

Y aunque no es una actividad barata (ni tranquila) fue realmente emocionante descender 4 km río abajo. Y, aunque tampoco contábamos con el esfuerzo que supone remar para evitar encallar en las piedras, o la sensación de caer en sus gélidas aguas, la experiencia compensa: saltar en la barca luchando contra la fuerza del agua, lanzarse desde las rocas hasta el río, dejarse llevar nadando por la corriente los últimos metros.

Etapa 11: Aprendiendo de la I Guerra Mundial entre montañas

El pueblo de Kobarid es aparentemente más tranquilo que Bovec, y, además de sus atractivos naturales, como el propio río Soca o las cascadas Kozjak, tiene un vínculo muy especial con diversos acontecimientos históricos. Este pueblo tuvo un importante papel en la I Guerra Mundial, ya que en estas tierras tuvo lugar la famosa Batalla de Caporeto.

Os recomendamos que visitéis el Museo de Kobarid, uno de los museos sobre la I Guerra Mundial más ilustrativos y didácticos. Encontramos todo tipo de material conservado a lo largo de los años, desde armamento, material médico, equipos de comunicaciones, fotografías reales, etc.

También se puede realizar un recorrido por las trincheras y lugares conmemorativos de la guerra para entender mejor los acontecimientos que han marcado la historia de este pueblo y de todo el país.

Otro de los puntos más visitados de Kobarid son las Cascadas Kozjak. Para llegar a ellas tendremos que atravesar el impresionante Puente de Napoleón, que os dejará unas vistas espectaculares del río Soca, con ese color que no os podréis quitar de la cabeza.

Etapa 12: Relax en el Río de Las Crónicas de Narnia

Nuestra despedida de Eslovenia no podía ser otra que en el Río Soca. Días antes habíamos visto la película Las Crónicas de Narnia: El príncipe Caspian y nos maravillaba pensar que íbamos a estar en uno de los escenarios fantásticos donde se rodó esta película.

En diferentes puntos en las inmediaciones de Kobarid, hay accesos habilitados que permiten a los visitantes bajar hasta el río y poder disfrutar de sus aguas frías, pero hermosísimas. Este día fue de relax, de meditar todo lo vivido y de recoger y ordenar con tranquilidad todas nuestras cosas antes de iniciar el camino de vuelta.

Lo que más nos gustó de Eslovenia

  • La poca densidad de población, es decir, que aunque es un país muy turístico, nunca nos hemos llegado a sentir agobiados, ni hemos percibido masificación, ni siquiera en lugares muy frecuentados por veraneantes como Bled.
  • La cantidad de masa forestal, ver bosques allá donde mirases y sentir que el aire es más puro que en cualquier otro lugar. Percibimos, además, una sensibilidad especial por el mantenimiento del medito natural.
  • Facilidades en pueblos y ciudades para circular en bicicleta. Muchos carriles bici, y donde no los hay, mucho respeto por el ciclista.
  • La educación y respeto de la gente, especialmente en la conducción.
  • Al ser un país pequeño, todo está cerca, no hay que hacer muchos kilómetros para ir de un punto a otro. Esto facilita mucho la planificación de rutas y el vivir el viaje sin prisas ni agobios.
  • Los quesos y los helados, como cualquier país de montaña y prados, los lácteos son una maravilla.

Lo que menos nos gustó de Eslovenia

  • La legislación no permite pernoctar fuera de áreas o de campings. Esto es lo que suele echar para atrás a muchos viajeros. Tener que planificar muy bien las rutas y paradas porque no puedes estacionar de noche fuera de las zonas habilitadas para autocaravanas o vehículos vivienda. 
  • Los altos precios de los parkings y las áreas. Existe, además, una diferencia muy elevada en cuanto a la tarifa por aparcar un turismo o un vehículo camper. 
  • La sensación de que hay que pagar por todo, por aparcar en un descampado en mitad del campo, por ver una cascada que ya de por sí te la ofrece la naturaleza, por pasar por una carretera de apenas 5-6 kilómetros… Nos llevamos la sensación de que capitalizan todo lo que tiene que ver con turismo, al margen de que te ofrezcan o no un servicio. Si huele a turismo hay que pagar.
  • Aunque siempre hemos encontrado sitio para pasar la noche (si no había plaza en un área o camping, inmediatamente nos enviaban a otro donde sí la había), faltan más infraestructuras, sobre todo de campings. En zonas como Bled, Bohinj o el Valle del Soca, los campings están saturados y es casi imposible conseguir una parcela.

¡Pincha aquí si te perdiste la primera parte de nuestro viaje en autocaravana por Eslovenia!.

Créditos de las imágenes: Celia Villa

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