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Francia verano 2011

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    migue
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    Este es el relato del viaje que realizamos mi familia y yo en agosto de 2011. Voy a tratar de detalles y consejos que espero sean de ayuda para otros viajeros.
    Para empezar comentaros que partimos de Córdoba. Como vehiculo tenemos una Citroen Berlingo diesel que tira de una caravana Vimara ( Knaus ) de cuatro plazas de 750 kg de tara. Mi familia la formamos mis dos hijos, Javier y David de 14 y 11 años respectivamente, mi mujer Isabel y Javier que soy yo.
    El objetivo del viaje era visitar el Monte San Michel, la zona del desembarco de Normandía y recorrer la zona de los Castillos del Loira.
    Paso a detallaros el diario de nuestro viaje.

    1º Día. Salimos de Córdoba el 28 de julio a las 6.30 h de la mañana con destino a nuestra primera parada en el Monasterio de Rodilla ( Burgos ) 679 km. Llegamos al camping Picón del Conde sobre las 5 de la tarde.
    El camping está situado muy cerca de la autovía, nos costó ( caravana, coche, luz, 3 adultos y 1 niño ) 28.40 euros. Es un camping pequeño, de gente que va de paso, pero sin problemas para encontrar parcela sin reservar. Tiene una piscina magnifica con tobogán incluido. Dispone de wifi gratuito en el bar-recepción, los aseos bien, las parcelas bien. Preguntamos la hora de apertura de la recepción y nos dijeron que no abrirían hasta las 10 de la mañana, por lo que dejamos pagado el camping el día anterior con la idea de salir temprano. Por cierto se cumplió el dicho que dice “hace más frío que en Burgos”, dormimos en los sacos y nos levantamos con 7 ºC por la mañana. Comentaros que utilizaremos este camping para los próximos viajes que realicemos a Francia.
    Mi valoración del camping sería de un “6”

    2º Día. Nos levantamos temprano para salir a las 7 de la mañana hacia nuestra siguiente parada ya en Francia. Hemos elegido un camping próximo a la zona turística de Arcanchón y que a su vez este cerca de la autopista. El camping elegido es Parc du Val de L’Eyre en Salles a 391 km.
    Siguiendo el consejo de otros viajeros llenamos el depósito de gasoil en el País Vasco, a 1.23 euros comprobando al cruzar la frontera la diferencia de precio en la primera gasolinera que nos encontramos que estaba a 1.54 euros aunque fue bajando en otras gasolineras hasta 1.40 euros.
    Llegamos al camping a las 3 de la tarde, encontrando la recepción cerrada hasta las 4 de la tarde, por lo que nos preparamos para comer en el parking del camping hasta que abriesen.
    Primer contratiempo, no hablan castellano ni ingles en recepción y como es natural yo tampoco hablo francés, pero al final nos entendemos. Nos dan la parcela donde nos instalamos para pasar 3 días. Aprovechamos para irnos por la tarde a la piscina climatizada y descansar del viaje.

    3er Día. Para este día hemos contratado en el camping una excursión en piragua por el río L’Eyre creo recordar que nos costo 13 euros por persona. El recorrido era de 12 km descendente con una corriente suave a través de un bosque maravilloso, todo muy “idílico” ¿verdad? Pues ¡No! Para empezar no sabemos muy bien manejar las piraguas, si le sumamos la corriente del río y los árboles caídos que teníamos que esquivar dieron como resultado un INFIERNO. Un recorrido que nos dijeron se hacía en 3 horas tranquilamente, tardamos 5 horas, parecía que no llegaríamos nunca al final. Acabamos molidos, no teníamos ganas ni de hablar. Con el descenso de Sella que hicimos el verano anterior y este, creo que ya hemos cumplido con el piragüismo. Después de una siesta obligada nos vamos a la piscina a descansar una rato, allí nos enteramos que el camping tenía un jacuzzi al que teníamos derecho 30 minutos gratuitos diarios, pues al jacuzzi que nos fuímos. Pasamos el reto del día en el camping.

    4º Día. Nos levantamos que no podíamos movernos de las agujetas que teníamos. Ese día aprovechamos para ir a visitar por la mañana la Duna de Pilas y la localidad próxima de Arcanchón.
    La excursión a la Duna de Pilas es muy recomendable, se trata de una montaña enorme de arena que separa el bosque de pinos de la orilla del mar. No voy a daros dimensiones concretas de la duna pero para subir a su cresta tuvimos que subir al menos cien escalones por una escalera colocada para ello. Una vez arriba las vistas son espectaculares, a la derecha la bahia de Arcanchón surcada por decenas de lanchas y barcos, a izquierda un mar de pinos, al frente apreciamos la longitud de la duna de al menos 2 o 3 kilómetros de largo y a nuestra espalda vemos la localidad de Arcanchón. Para bajar de la duna hacerlo por la arena es una pasada y si es corriendo mejor. Para la visitar la duna dejamos el coche en el parking (4 €) y andamos unos 500 metros por un camino lleno de tiendas de souvenirs, restaurantes y bares. Sobra decir que había miles de personas allí.
    De la Duna nos fuimos después a la localidad de Arcanchón. Dimos un agradable paseo por la playa y el puerto y al mediodía de regreso al camping para comer y pasar el resto del día descansando en la piscina y el jacuzzi y para preparar la siguiente etapa en del viaje.
    Comentar que el camping Parc du Val de L’Eyre nos costo unos 48 € diarios. Se encuentra situado dentro de un bosque junto al río que lleva su nombre. Además de poder contratar las piraguas y utilizar gratuitamente el jacuzzi como ya he comentado, también he de decir que las parcelas son enormes, la piscina está climatizada y tiene un tobogán gigante, tiene minigolf, pin-pon, petanca, pistas deportivas, programa de animación, etc. Tienes la oportunidad de hacer senderismo y si te gusta la pesca también tiene un lago propio donde se puede pescar tranquilamente. Frente al camping tienes un Carrefour para hacer las compras con un horario de 9:00 a 20:00 horas con gasolinera propia donde echamos gasoil a 1.23 €.
    Mi valoración del camping sería de un “8”, muy tranquilo, ideal para descansar unos días tanto en la ida como en la vuelta.

    5º Día. Salimos a la 7 de la mañana del camping con destino a nuestro primer gran objetivo que es la visita al Monte San Michel. El viaje fue muy tranquilo, parando cada cierto tiempo en las magnificas áreas de descanso que te encuentras por la autopista cada 15 o 20 km. Habíamos leído en los foros que los peajes eran elevados y pudimos comprobarlo en nuestras carnes cuando nos soplaron de golpe 41.70 €, por suerte al llegar a la zona de Bretaña-Normandía las autopistas eran gratuitas.
    Hemos elegido como base para instalarnos el camping Haliotis en la localidad de Pontorson a unos 12 km del Monte San Michel, pero al llegar estaba completo, no hay problema, consulto el tomtom y me aparecen unos 15 camping en una radio de 30 km. Elegimos el camping Campeole St.Gregoire (34.20 € diarios), donde estaremos acampados 5 días. Llegamos al mediodía tras 600 km y nos instalamos quedándonos el resto del día en el camping para descansar e ir de compras para reponer la despensa.

    6º Día. Salimos temprano para visitar Abranches, localidad próxima a unos 18 km del camping. Esta localidad fue clave para el éxito del avance de los aliados durante los días del desembarco, vimos un tanque “Sherman” rodeado de banderas de los aliados en una rotonda, a continuación nos dirigimos a la oficina de turismo donde nos informan y preparamos el recorrido. Tras la oficina de turismo hay un jardín donde hay un monumento con los nombres de los caídos de la localidad en distintas guerras, seguimos con la visita a un castillo próximo de entrada gratuita, allí subimos a las almenas desde donde teníamos una panorámica pintoresca de Abranches con sus tejados acuchillados de pizarra gris, destacando varias iglesias entre ellas la que llaman la pequeña “Notre Dame”. A continuación visitamos el museo municipal (1.50 € adultos, niños gratis), paseo por el casco histórico y visita a varias iglesias. No vimos el museo de los manuscritos del Monte San Michel (7 € adultos, 3 € niños) por que seguramente se aburrirían los niños. De allí nos fuimos a la localidad de Montjoie-Saint-Martin a unos 30 km a visitar el cementerio americano de Saint-James donde hay enterrados alrededor de 4.500 americanos. La visita es gratuita y merece la pena, ya que te vas ha encontrar con un campo de cruces y estrellas de David milimétricamente alineadas, en un campo de césped impecablemente cortado, rodeado de grandes árboles y jardines envuelto todo en la tranquilidad más absoluta puesto que estábamos solo nosotros y los jardineros. Como la cosa iba de cementerios nos fuimos a visitar el cementerio alemán en Huisnes-sur-Mer de entrada gratuita. Este cementerio se caracteriza por su sobriedad, en él se encuentran enterrados 12.000 soldados alemanes dispuestos en nichos, en un edificio de granito con forma de anillo de dos plantas en cuyo centro hay un campo de césped rematado por una cruz enorme de granito. De allí nos fuimos al camping que estaba al lado a unos 4 km a comer y descansar un rato.
    Por la tarde fuimos a visitar un molino de viento próximo (4 € persona) que no entramos, sólo lo vimos por fuera. De allí nos fuimos a visitar el Monte San Michel, llegamos a las 7 de la tarde y tuvimos que dejar el coche en un parking bastante alejado a unos 3 o 4 km. Tras llevar andando 15 minutos y quedar un rato para llegar, la hora que era y la amenaza de lluvia, decidimos realizar la visita otro día y nos volvemos al camping.

    Día 7. Este día lo dedicamos exclusivamente a recorrer la zona del “Desembarco”. En un principio habíamos pensado acampar 1 ó 2 noches cerca de Caen, pero decidimos no mover la caravana del camping y desplazarnos en coche.
    Nos levantamos temprano para recorrer los 130 km que nos separaban de nuestra primera visita en Ouistreham que era el museo del Muro Atlántico. Se trata de un bunker de cuatro plantas a lo alto, utilizado para la observación de la costa, donde podemos ver la organización del mismo (dormitorios, arsenal, enfermería, sistema de ventilación, comedor, etc) en cuyo exterior hay una lancha de desembarco, varios cañones y algunos tanques. El precio de la entrada es 7 € adultos y 5 € niños. Como toda la costa está plagada de zonas fortificadas, bunkers y baterías, unas gratuitas y de otras de pago, hemos decidido visitar las gratuitas. Nuestra siguiente visita es Site Hillman en Colleville-Montgomery. Se trata de un enclave fortificado en medio del campo que defendía un cruce de caminos importante, allí vimos Bunkers donde se emplazaban morteros, ametralladoras y cañones, así como otros en los que se emplazaban los dormitorios, la cocina, el puesto de mando. Estos Bunkers estaban unidos por trincheras de las que aún quedan algunas. Nuestro siguiente destino es el Museo del Desembarco en Arromanches (7 € adultos, 5 € niños). Es un museo dedicado a la construcción del puerto artificial que se construyo en tiempo record y que fue la clave de la victoria de los Aliados en Normandía. Hay en su interior maquetas que detallan el puerto y como se llevaba a cabo el desembarco de víveres y refuerzos. Dispone de dos salas audiovisuales con proyecciones en varios idiomas. Si queréis ahorrar tiempo de espera pedir las proyecciones en castellano al personal del museo, ya que van pocos españoles y los pases predominan en francés, ingles y alemán.
    Tras la visita parada para comer en una pizzería (2 pizzas medianas y 4 bebidas 32 €).
    Nuestro siguiente destino es Longues-sur-Mer para ver la batería de su mismo nombre. Se trata de un conjunto formado por un bunker de puesto de mando sobre un acantilado frente al mar y de cuatro Bunkers o casamatas más al interior que protegen cada una, un cañón de 150 mm. Esta defensa costera alemana está clasificada de monumento Histórico. De allí nos vamos a la localidad de St. Lauret-sur-Mer para visitar el cementerio americano. Este cementerio es mucho más grande y turístico, ya que sin exagerar podría haber entre 5.000 ó 6.000 personas visitándolo. En el hay enterrados unos 10.000 soldados americanos en un inmenso campo de césped impecablemente cuidado, con las cruces alineadas milimétricamente como ya vimos en el de St. James. Desde un lateral del cementerio se ve a unos cientos de metros una panorámica impresionante de la playa Omaha donde murieron muchos de los soldados allí enterrados. También hay un centro de interpretación del cementerio lleno de audiovisuales donde cuentan breves historias de algunos de los allí enterrados, así como otra en la que se nombran a todos los soldados que están enterrados. Para terminar la visita a los lugares del “Día D” nos desplazamos a Cricqueville-en-Bessin para ver Pointe du Hoc. Este emplazamiento fue un punto estratégico de las fortificaciones alemanas en la costa Normanda, plagada de Bunkers que fue tomado por los Rangers tras sufrir enormes bajas. Pudimos ver un gran número de bunkers la mayoría destruidos y otros en buen estado en medio de lo que parece un paisaje lunar debido a los cráteres en el terreno producidos por los bombardeos que acompañaron los combates que tuvieron lugar el 6 y 7 de junio de 1944. Como ya estábamos bastante cansados y teníamos 140 km por delante decidimos volvernos al camping para reponer fuerzas para el día siguiente.

    Día 8. Ha estado toda la noche lloviendo y por la mañana no ha parado. La previsión es que va ha estar lloviendo todo el día. Decidimos no hacer ninguna visita y quedarnos en el camping. Aprovechamos para poner unas lavadoras, vaciamos el depósito del wc y vamos al super a reponer la despensa y llenar el depósito de gasoil.

    Día 9. Nos levantamos temprano y nos vamos al Monte San Michel llegando sobre las 8.30 de la mañana, por suerte hoy hemos dejado el coche en un parking bastante cerca del monasterio (4 €). La vista desde el parking es espectacular divisando toda la isla amurallada y coronada por la abadía. Para llegar al monasterio hay que ascender por una estrecha calle llena de tiendas y restaurantes, todo muy medieval, incluso atravesamos un puente levadizo. Llegamos a la taquilla del monasterio justo cuando se habría a las 9 de la mañana por lo que hicimos poca cola en la taquilla (9 € adultos y gratis para menores de 25 años). La abadía es impresionante tanto por la magnitud de la obra como por su belleza. Las vistas desde la explanada de la parte alta son magníficas, pudiendo apreciar toda la extensión de tierra que queda sumergida cuando sube la marea, quedando sólo conectada al continente por una carretera. Desde allí arriba pudimos ver también que había cientos de coches accediendo al parking y miles de turistas accediendo a pie, por lo que decidimos comenzar la visita sin demorarnos mucho. Es de destacar su magnífico claustro, junto con otras salas como el refectorio ó la sala donde confeccionaban los mojes los manuscritos, pero sobre todo la magnitud y grandiosidad de la obra (muros de 4 ó 5 metros de espesor, columnas de unos 3 metros de diámetro, etc). Tras visitar la abadía paramos para comprar algún recuerdo en una de sus tiendas, aunque estaba lloviendo, las calles estaban abarrotadas de turistas que llegaban y que casi te impedían andar, por lo que os recomiendo que vayáis temprano para evitar las colas. Del Monte San Michel ponemos rumbo a la ciudad de St-Malo.
    St-Malo es una ciudad muy turística que fue utilizada como puerto por los corsarios, cuyo casco antiguo esta dentro de un recinto amurallado y defendido por varios fuertes. Sus calles están repletas de tiendas y locales de restauración, aprovechamos uno de esos restaurantes para probar los famosos “moulets” (mejillones cocidos), nos costó una ración de mejillones con patatas fritas y una copa de vino 10 €. Tras dar un paseo por sus calles nos dirigimos al siguiente destino que es la ciudad medieval de Dinan. La visita de esta ciudad es muy recomendable, ya que al pasear por las calles del casco antiguo parece que retrocedes al tiempo de los caballeros luchando en los torneos por el favor de una dama. Podemos ver un castillo, murallas, torres fortificadas, etc. Pasear por calles pintorescas bordeadas por numerosas casas de entramado de madera ó visitar varias iglesias entre otras cosas.
    Cansados de la jornada volvemos al camping a descansar para preparar la salida de nuestro último objetivo del viaje, que es visitar la zona de los Castillos del Loira.
    Paso ahora a valorar el camping. El camping Campeole St. Gegorie pertenece a la cadena Campeole que cuenta con varias decenas de campings repartidos por Francia. Es un camping pequeño, pero con los servicios básicos. Las parcelas están bien, dispone de piscina climatizada pequeña, wifi gratuito, barbacoas y mesa de pin-pon. En recepción hablan en castellano. Un punto negativo es que cerraban los servicios para limpiarlos 8 a 9 de la mañana y de 7 a 8 de la tarde. Mi valoración es de un “6”, si volvemos por la zona seguramente elegiremos otro camping.

    Día 10. Para no variar salimos a las 7 de la mañana con destino a la localidad de Amboise a unos 470 km, paramos en una de las magníficas áreas de descanso que nos encontramos para desayunar y antes de las 14.00 horas llegamos al camping municipal de Amboise. En recepción pedimos una parcela y sin problemas, me indican el precio diario y no me lo creía sólo 17 € diarios, había leído en los foros que los camping municipales de Francia eran baratos y en este lo pude comprobar.
    Por la tarde vamos a la oficina de turismo a pedir información sobre los castillos, dándonos un folleto con ofertas de visitas combinadas a varios castillos de los que os pongo algunos ejemplos:
    Pass 1. Chambord, Cheverny y Blois (22.70 € adultos y 9 € niños hasta 17 años).
    Pass 2. Villandry, Azay-le-Rideau, Langeais (24.5 € adultos y 12.7 € niños hasta 17 años).
    Pass 3. Amboise, Clos Lucé, Chaumont-sur-Loire (29 € adultos, 18 € niños hasta 11 años y 20.50 € hasta 14 años).
    Pass 4. 6 castillos Pass 1 + Pass 2 (53.2 € adult, 27.5 € hasta 11 años y 30 € hasta 14 años).
    Pass 5. 9 castillos Pass 1 + Pass 2 + Pass 3 (76.2 € ad, 38.7 € hasta 11 años y 41.2 € hasta 14 años).

    Pasamos el resto del día en el camping jugando al minigolf y preparando las visitas para los días siguientes.

    Día 11. Para este día hemos decidido sacar el Pass 1 comprando las entradas en la oficina de turismo de Amboise y así nos ahorramos las colas en las taquillas de los castillos. Nos dirigimos en primer lugar al castillo Real de Blois. Dejamos el coche en el parking próximo al castillo (2 ò 3 €). Comentar que merece la pena la visita a este castillo, destacando el mobiliario de los aposentos, el patio interior con su magnifica escalera de trazado italiano, pero sobre todo nos gusto el espectáculo de lucha de mosqueteros que nos ofrecieron en el patio.
    Tras visitar Blois nos vamos a visitar el castillo de Chambord. Aparcamos en el parking (creo que unos 4 €), comimos en uno de los muchos restaurantes que había junto al castillo antes de visitarlo. Chambord presenta una arquitectura incomparable con más de 90 salas llenas de multitud de cuadros, tapices y muebles, tiene una escalera circular extraordinaria, terrazas desde donde se tiene una panorámica de todo el territorio, sus tejados plagados de chimeneas…
    Chambord es el castillo más grande y concurrido que hemos visitado. Posee un enorme bosque que es la reserva de fauna y flora salvaje más grande de toda Europa por el que mucha gente aprovechaba para andar o pasear en bicicleta. Frente al castillo hay un canal donde algunos turistas paseaban en barca y otros hacían picnic en la orilla. Por todo ello hace muy recomendable su visita.

    Día 12. Este día nos fuimos a visitar el castillo o mejor dicho Palacio de Cheverny. El parking es gratuito. Es el castillo más pequeño que hemos visitado dentro de la grandiosidad de este tipo edificaciones, pero con el mobiliario más rico y ha nuestro juicio más bonito. Es de destacar además del castillo en sí, el bosque propio que posee por el que discurren canales de agua, su lago lleno de cisnes y patos, sus magníficos jardines, el invernadero y su huerto, y la perrera con más de cien perros de cacería.
    En Cheverny contratamos un paseo de unos 30 minutos en tren eléctrico por el bosque y un paseo en barco recorriendo sus canales por unos 7 € por persona. A mediodía nos vamos al camping a comer y pasamos allí el resto del día descansando y jugando al minigolf.

    Día 13. Tras desayunar nos vamos al castillo de Chenonceau, que está próximo a Amboise. El parking creo recordar que era gratuito y la entrada al castillo de unos 11 € adultos y unos 7 € niños. Para mí gusto Chenonceau es el castillo bello de los que hemos visitado, está construido sobre las aguas del río cher. Del castillo destaca además de la construcción exterior, el interior de sus dependencias ricamente amuebladas con gran cantidad de cuadros y tapices, estando todas sus habitaciones decoradas con grandes centros de flores naturales procedentes de su vivero, es digna de mención las dependencias de la cocina, así como los jardines exteriores de Diana de Poitiers y Catalina de Médicis. En los exteriores del castillo podemos ver también una granja del siglo XVI, una huerta con calabazas espectaculares y un laberinto. En mi opinión esta es una de las visitas obligadas que no hay que perderse.
    Tras la visita a Chenonceau, nos volvemos a comer al camping y por la tarde preparar la salida y comenzar la vuelta a casa.
    No vimos el castillo Real de Amboise ni el de Clos Luce ambos en Amboise, por que los dejamos para el final, y entre la falta de días y nuestro ya menguado bolsillo decidimos dejarlos para nuestra próxima visita.
    Paso a evaluaros el Camping municipal de Amboise. Tiene una ubicación privilegiada situado en una isla del río Loira, frente al castillo Real de Amboise. Es un camping muy grande con unas 400 parcelas todas ellas llanas y muy amplias. Tiene un minigolf gratuito, no tiene piscina pero está la municipal al lado (1.5 €/persona), está rodeado de campos de deporte: futbol, baloncesto, circuitos de gimnasia, etc. Puedes hacer senderismo y pasear con bicicleta. Está a 5 minutos andando de Amboise. Como punto negativo diría que tiene un solo módulo de servicios nuevos y varios portátiles, pero a mi juicio insuficientes y bastante distanciados. Si acampas cerca de los servicios nuevos no hay problema, pero si no…. Como valoración muy positiva su precio sólo 17 € diarios. Lo valoro con un “8” y volveré si visitamos la zona.

    Día 14. Hoy comenzamos la vuelta a casa. Nos levantamos como es ya costumbre temprano para salir a las 7 de la mañana destino a un camping sin determinar cerca de la frontera con España y que no nos tengamos que desviar en exceso de la autopista, para lo que consulto el tomtom eligiendo el camping municipal Le Galán en la localidad de Castets a unos 480 km. Llegamos antes del mediodía tras pagar 48.40 € de peaje. Acampamos y pasamos allí el resto de la tarde. En cuanto al camping nos costo 22.45 euros. Las parcelas son pequeñas, los aseos son antiguos pero limpios, no tiene piscina para adultos ni zona deportiva, mi valoración es de un “5”.

    Día 15. Salimos pronto con ganas de llegar a España. Nuestro próximo destino es Covarrubias en Burgos, con la idea de visitar el monasterio de Santo Domingo de Silos. Antes de mediodía llegamos al camping Covarrubias, nos instalamos y pasamos la tarde en la piscina, por la noche damos un paseo por esta localidad.

    Día 16. Por la mañana visitamos el Monasterio de Santo Domingo de Silos (3.5 euros persona incluido niños), recorremos el desfiladero de Yecla y visitamos el Monasterio de Arlanza. La tarde la pasamos en la piscina del camping. Mencionar que el camping nos salió 29.40 € diarios, tiene muy pocas parcelas libres por estar ocupadas las demás por campistas fijos y estas son pequeñas, en pendiente y llenas de piedras. No tiene zona deportiva, los aseos antiguos pero limpios, tiene una magnifica piscina. Mi valoración es de “5” gracias a la piscina.

    Día 17. Hoy hemos salido a las 7 de la mañana y tras recorrer 680 km llegamos a casa sobre las 4.30 de la tarde dando por terminado nuestro viaje.

    En el viaje hemos recorrido 4.660 km, gastado unos 550 € en combustible, 140 € en peajes y 497 € en campings.

    Ahora os voy a comentar curiosidades y consejos que espero sean de ayuda.

    En Francia hay que tener muy en cuenta los horarios de apertura y cierre de campings, supermercados, monumentos, etc.
    En algunos campings no permiten en la piscina bañadores tipo pantalón, por lo que no está demás llevar uno tipo slips o boxer.
    Los servicios en los campings son mixtos y en la mayoría los cerraban cuando los limpiaban.
    Fuimos sin reservar en ningún camping y no hubo problemas, ya que Francia está llena de campings y en especial las zonas turísticas.
    Para el próximo viaje elegiremos dentro de lo posible los campings municipales por su bajo coste.
    No había supermercado en los campings, pero se podía encargar pan y croasants en la recepción.
    Las áreas de descaso de Francia son magnificas, te las encuentras cada 15 o 20 km, todas con sanitarios muy limpios totalmente equipados con jabón, secamanos y papel higiénico e incluso en algunas había duchas. Disponen de mesas y bancos, papeleras y parque de juegos para los niños, todo muy cuidado. Nosotros las usábamos para desayunar y comer cuando nos pillaba en ruta.
    No hemos evitado ningún peaje por que, ya que los desplazamientos son largos y vamos despacio, tratamos que el viaje sea lo mas cómodo y rápido posible y creo que la cantidad que se paga no es tanta con respecto a otros gastos como el combustible o las entradas.
    A la hora de echar combustible en Francia es más barato hacerlo en las gasolineras de los supermercados tipo Carrefour o intermarché.
    En cuanto a los precios de comer o comprar, me parece prácticamente igual que en Córdoba, sólo que hay que mirar antes donde te metes.
    Sobra decir que si queréis que os cunda el día y evitaros aglomeraciones y colas, es importante ir temprano a los sitios.
    Si vais a visitar los castillos del Loira podéis sacar las entradas de la mayoría, en las oficinas de turismo y así os evitáis las colas en las taquillas, y si os pilla la hora de comer y queréis ahorrar unos euros podéis llevar un picnic, ya que todos cuentan con una zona destinada para ello. Por todos sitios encuentras servicios públicos.
    Nos extrañó ver muy pocas papeleras por las calles pero paradójicamente estas estaban muy limpias, ejemplo de civismo.
    Al igual que leí en otros relatos, pasamos por pueblos y ciudades prácticamente desiertos, sin alma alguna, llegando a la conclusión de que todos estaban visitando el Monte San Michel ó el Castillo de Chambord. Es broma ¡ja, ja!
    Francia es el paraíso de los campistas y sobre todo para los que tienen autocaravana. Por todas partes te encuentras zonas de estacionamiento para pernoctar donde pueden vaciar y llenar depósitos gratis o a precios irrisorios.
    Y por último y muy importante, ¡no venden tomate frito en los supermercados! Sólo encuentras salsa boloñesa, parmesano, etc.

    Bueno espero no haberos cansado en exceso con mi relato y que os sirva de ayuda. Ahora ha preparar la próxima salida.

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