En el capitulo anterior nuestros amigos emprendieron un viaje en camper por Nueva Zelanda y recorrieron gran parte de la isla. En este relato nos cuentan como termino su viaje y nos ofrecen consejos y recomendaciones para viajar por Nueva Zelanda con la casa a cuestas.
Por Nuria Pujol y Raimon Sánchez
De Tongariro a Palmerston North (394 km)
Nos despertamos muy pronto, seguramente del frío. A las seis y media de la mañana estamos a menos dos grados, y aunque los edredones son muy gruesos y calentitos, estamos congelados. Escogemos la caminata de Rotopounamu Walk un recorrido circular de una hora y media aproximadamente que circula alrededor del lago del mismo nombre. A pesar que no es un lugar espectacular, merece la pena por silencio y algunos rincones. Como recomendación, si disponeis de poco tiempo es un paseo prescindible.
Continuamos hacia el lago Rotoaira y aunque ha empezado a llover, contemplar el volcán Ruapehu es impresionante, y como luce el sol, se ve perfectamente la cima nevada y la vegetación frondosa alrededor. Seguimos por la carretera SH41 y la 4 para bordear el Parque Nacional.
En la aplicación de CamperMate señalan un punto llamado «Mordor» y nos llama la atención, así que ponemos el gps y hacia allí nos vamos. Tardamos una hora en llegar a la estación de esquí de Turoa en la vertiente sur del monte Ruhapeu. La carretera es buena hasta llegar a Ohakune, pero los veinte kilómetros hasta la estación no. Es una carretera de gravilla y con algunos tramos en obras. Está todo nevado y justo cuando llegamos empieza una fuerte ventisca y se cubre toda la cima. Sin apenas visibilidad, damos media vuelta. Paramos en las Mangawhero Falls, un salto de agua muy bonito.
Hay que decir que en El Señor de los Anillos, Mordor se sitúa en el monte Ngauruhoe pero alguien la ubicó de forma incorrecta en la aplicación y ahí se mantiene el error. Paramos a comer en Ohakune, un lugar lleno de hipsters, tiendas de ski y deportes de aventura, ropa deportiva, foodtracks y poco más. Hay una zanahoria de grandes dimensiones en la entrada del pueblo porque es la capital nacional de la zanahoria y lo celebran cada año con el Carrot Festival.
El tiempo ha mejorado considerablemente y antes de continuar el camino hacia Palmerston North, nos desviamos hacia el norte y recorremos unos 40 kilómetros de la SH49 bordeando el parque nacional en su cara este para recorrer un tramo de la Desert Road, un paisaje árido y típico de climas fríos que que nos regala unas vistas del Tongariro pre-ciosas. Retomamos la SH1 hacia el sur. Pasamos por pueblos sin ningún interés aunque ellos lo consideran dignos de poner en las guías.
Eso sí, todo cambia cuando son escenarios de El Señor de los Anillos. A 20 km del pueblo y por una carretera secundaria, llegamos al Mokai Gravity Canyon que según la CamperMate corresponde a un escenario de la película. Así que para allí que nos vamos. El paisaje es precioso, pero hay que decir que no es ningún set del film. Pero insitimos, en que los comentarios de la App de CamperMate merece la pena seguirlos, ya que las recomendaciones son buenas.
Nos quedan 100 km hasta Palmerston North. Llegamos sobre las cuatro de la tarde. Es un jueves por la tarde y hay mucho ambiente en las calles, sobre todo estudiantes de la universidad de Massey, la segunda más grande del país. Aparcamos el camper en un parking público y gratuito ubicado a cinco minutos de The Square, el centro de la ciudad, con muchos edificios de estilo Art Decó. Hay muchas cervecerías artesanales así que ya tenemos plan para después de cenar.
Rumbo a Wellington (151 km)
Aunque el parking donde pasamos la noche está muy céntrico, resulta ser una zona tranquila y dormimos como lirones hasta las ocho. No tenemos prisa porque el Museo Nacional de Rugby de Nueva Zelanda abre a las diez. Esta es la razón de quedarnos en Palmerston North conocer este museo único si eres aficionado al rugby. En la entrada del museo hay una escultura de bronce de Charles Monro, el neozelandés que al regresar de sus estudios universitarios en Inglaterra introdujo el rugby en el año 1870.
En la planta inferior se ubica ell Museo Te Manawa dedicado a la cultura maorí (gratis) y en la planta superior, al Museo del Rugby ( 12 NZD). Esa mañana había un voluntario que sabía muchísimo y explicaba curiosidades y anécdotas mientras paseábamos por las salas. De entre todos los objetos expuestos, nos llamó la atención la colección de fotos de las protestas que hubo por todo el país cuando los Springboks jugaron en 1981 contra los All Blacks y en pleno apartheid, se negaron a participar si había jugadores de origen maorí.
Después de una magnífica visita, continuamos por la SH1 hacia Wellington por la costa.
Hay tramos de autovía que deben ser tan nuevos que ni aparecen en el gps. Las playas que se ven son espectaculares y dan ganas de pararse cada dos minutos.
Entramos en el «Queen Elizabeth Park» ubicado en Paraparaumu pero el viento es demasiado fuerte para caminar por la playa de dunas. Desde la carretera vemos un mirador que no aparece ni en la guía ni el gps, y allí nos vamos. Es el Paekakariki Hill Road Lookout. A pesar de la carretera estrecha y muchas curvas las vistas de toda la costa y de la Isla Sur son brutales.
Nos quedan 40 km hasta Wellington y hay mucho tráfico. Ya dentro de la ciudad, tardamos como 15 minutos en hacer cuatro kilómetros, y aunque llevamos gps, moverse por aquí es complicado ya que el gps nos señala calles por las que no cabemos o son dirección prohibida.
Necesitamos un supermercado pero no encontramos parking en el centro, por lo que tenemos que recorrer 15 kilómetros hacia las afueras hasta un Pack’n Save.Aparcamos en el único lugar disponible en toda la ciudad para pasar la noche en estas fechas. Es un parking público en Garret Street con cinco plazas para campers. Pagamos 29 NZD y aunque tiene tomas de electricidad no tiene de aguas. Para colmo, por normativa hay que salir al día siguiente a las ocho de la mañana. Pero bueno, es este parking o este.
Salimos a dar una vuelta hasta el Wharf donde los bares están llenos, quizás por que es viernes. Y las tiendas abren hasta las siete o las ocho. Lo único que debe cerrar pronto es justamente la oficina de turismo porque llegamos a las cinco y cinco y ya tenían la luz apagada. Cenamos en el Pomodoro que se reivindica como la mejor pizzería de Wellington ( y seguramente la más pequeña) y disfrutamos de los conciertos al aire libre que encontramos alrededor de Cuba Street.
Llegada a la Isla Sur
En CamperMate recomiendan la visita al bosque, donde se rodó la mítica escena del Señor de los Anillos donde Frodo y sus amigos se esconden de los Jinetes Negros. Por fin ha parado de llover, y nos adentramos en el precioso bosque, y con vistas también magníficas.
A las diez estamos de nuevo en la ciudad para visitar el museo Te Papa Tongarewa (entrada gratis, y una hora de parking a 4 NZD, así que lo dejaremos allí toda la mañana). El museo está considerado el mejor del país y con el mayor fondo de cultura maorí. Merece la pena, sin duda.
Aprovechamos para visitar una exposición temporal de la Batalla de Gallipoli, la mayor derrota de las tropas europeas durante la 1 Guerra Mundial y que supuso miles de bajas de las tropas ANZAC (de Australia y Nueva Zelanda) que acudieron a Gallipoli para ayudar a las tropas inglesas.
Al salir, nos vamos a la terminal de Ferries. En agosto solo hay cuatro servicios al día entre la Isla Norte y la Sur, así que habíamos hecho la reserva para el Ferry de las 14 h. Cuando el capitán da la orden nos dejan salir a cubierta para disfrutar de las vistas y del cielo, despejado después de la intensa lluvía. Que emoción, pasar el Estrecho de Cook.
La llegada a Pincton es también ágil y rápida. Hemos tenido suerte porqué al tener el coche en la fila central, somos los primeros en salir del Ferry así que desde que atracamos en el puerto hasta la salida, no pasan más de veinte minutos.
Tardamos otros cinco en llegar al camping Pincton Campervan Parc, un lugar muy tranquilo, silencioso, y aunque sencillo muy limpio y cuidado. Nos estrenamos en la Isla Sur con 1386 km a cuestas y lo celebramos con una barbacoa.
PINCTON, ABEL TASMAN NP Y MOTUEKA (450 km)
Salimos muy temprano hacia el Parque Nacional Abel Tasman porque hoy nos espera un buen trecho. La niebla está muy baja y conducimos con mucha precaución. Por suerte hay poco tráfico. A pesar del aspecto casi fantasmagórico de los bosques, el entorno es precioso. Llegamos a Nelson, una ciudad básicamente de veraneo donde ponemos gasolina. Desde Nelson, bordeamos toda la bahía de Tasman hacia el norte. La luz es perfecta para las fotografías y es la mejor hora porque la marea está baja.
Pasado Riwaka hay un desvÍo para entrar en el parque nacional pero nos lo pasamos y nos encontramos metidos en la carretera 60, estrecha, con muchas curvas y para variar con el precipicio al lado en algunos trozos. Paramos en el Hawkes Lockout. y más adelante en el Takaka Hill Loockout un mirador con vistas impresionantes del valle en Upper Takaka. Damos media vuelta y regresamos para entrar en el parque. El señor Abel Tasman fue el primer europeo que descubrió Nueva Zelanda en 1642 después de ocupar la isla de Tasmania.
A juzgar por la oferta de alojamientos y de actividades de ocio en verano debe estar hasta la bandera. Lo confirma la cantidad de zona de aparcamiento que están habilitando ya que es el último punto al que se puede llegar en coche.
Desde aquí, salen los taxis acuáticos que permiten descubrir las hermosas playas como Anchorge Bay, Torrent Bay famosas por su arena dorada. Es todo tan bonito que nos quedamos un buen rato en las playas de Maharau, y donde comemos con unas magníficas vistas.
Desde aquí nos acercamos hasta el extremo de la playa, donde ya se prohibe circular. Aquí empiezan distintas rutas, nosotros bordeamos la playa y regresamos al coche.
Continuamos por la carretera SH60 así que nos toca hacer la misma ruta que antes. Estamos fascinados y muy felices, conduciendo en silencio, como si necesitasemos concentración máxima para absorber todo lo que estamos viendo este día.
A 6 km de Takaka se encuentran los manantiales de Te Waikoropupu Springs más conocidas como Pupu Falls, un espacio sagrado para la cultura maorí. Más que cataratas, son manantiales de agua pura que puedes recorrer en unos veinte minutos pero que está prohibido tocar ya que su agua sirve para bendecir las muertes y los nacimientos de los maoríes.
Continuamos por la misma carretera hasta Golden Bay, el extremo más al norte de la Isla Sur, donde la población de Collingwood marca el límite de la Reserva Natural de Farewell Spit, con su característica aguja de arena curvada donde termina la bahía y que es un lugar de gran valor espiritual para los maorís.
Como no podemos pasar porque empieza la zona protegida ni está autorizado acampar en la zona de las playas, nos conformamos con coger arena para nuestra colección. . Además de la bahía, se ven las cimas nevadas del cercano Parque Nacional de Kahurangi y con este cielo despejado, seguimos maravillados.
Para llegar a la Golden Bay la única manera es conducir por la SH60 así que nos toca deshacer el mismo trayecto de vuelta. Visto en el mapa, hemos rodeado todo el Abel Tasman pero no lo hemos visitado. Pasamos por el Mussel Inn, uno de los mejores pubs del mundo según algunas guías, pero por la hora que es nos apetece más un café que una cerveza artesana y pensando en el trozo que nos queda, continuamos hacia Motueka y aquí sí, paramos en la cervecería artesanal Hof Confederation ubicada en la misma carretera SH60.
De las tres zonas habilitadas en Motueka para dormir, la mejor es la playa, pero las ráfagas de viento son tan fuertes, que pensamos que será demasiado ruidoso durante la noche y nos vamos hacia el parking gratuito de Massey St, más protegido y ubicado al lado de un merendero, por lo que hay baños, duchas y barbacoa.
CAMINO A Greymouth (400 km)
Nos despierta muy temprano la intensa lluvia que cae. No nos altera demasiado los planes porque nuestra intención de hoy es hacer ruta y llegar hasta Wesport en la costa oeste y visitar las Pancake Rocks, en Punakaiki. Según Google maps son unas cuatro horas, por lo que nos permitimos desayunar con calma en la célebre Panadería Royale de Motueka.
Salimos hacia el sur por la SH6 para visitar el lago Rotoroa en medio de una inmenso bosque de abetos. El paisaje es precioso y con la niebla tiene un toque mágico. Los últimos kilómetros hasta el lago son una pista forestal, y aunque ha llovido mucho se circula bien.
Poco antes de llegar a Murchison, paramos en la Kawatiri Historic Raylway Walk y caminamos, óbviamente solos, al lado del río durante un buen rato.
A la salida de Murchison, un contratiempo. Nuestra idea era continuar por la SH6 hasta la Buller Gorge y su famoso puente colgante y llegar a la costa de Wesport pero es imposible porque ha habido un desprendimiento en la carretera y está cortada apenas salir de Murchison, por lo que si queremos llegar a la costa hay que ir por la SH69. Circulamos muy despacio y tendremos que hacer 180 km de más, rodeando todo el parque.
Al llegar a Greymouth, la lluvia es menos intensa y parece que despeja. Como aún es pronto, continuamos los 23 km hasta las Pancakes Rocks, unas formaciones rocosas muy particulares y cuya visita se puede hacer de forma libre y gratuita mientras hay luz solar (la oficina de turismo cierra a las cinco ). Se tarda unos 40 minutos con la calma y por suerte, ha parado de llover. De regreso, paramos muchas veces para tomar fotos de las playas y del mar revuelto. Es todo un espectáculo.
Llegamos a Greymouth casi de noche. Vuelve a llover. Aparcamos en una zona poco bonita pero después de 400 kilómetros, poco nos importa.
Glaciares y Parque nacional de Aspiring (406 km)
Salimos sobre las siete y media hacia los glaciares. Y nada más salir de Greymouth el paisaje es espectacular. Por el camino, paramos en algun mirador anunciado en la guía, que son verdaderos oasis de paz en estos momentos. Sobre las nueve y media llegamos al Glaciar Franz Joseph. No sabemos donde tomar fotos. Todo nos parece increiblemente precioso. Son paisajes de postal, sin duda.
Como los primeros buses con turistas llegan sobre las once, podemos hacer el trayecto completa-mente solos. Desde el parking, la caminata hasta el punto más cercano nos lleva algo más de hora y media y es un camino fácil y sin pendientes. En la oficina de turismo nos dan la información sobre las caminatas en el Parque Nacional de Westland, especialmente de los dos glaciares.
Empezamos por el de Franz Joseph. Es un paseo muy agradable.Por razones óbvias, el camino termina a un kilómetro aproximado de la lengua del glaciar. Seguimos hacia el Glaciar Fox, a 23 km. Aquí, la caminata es bastante más empinada y hay varios tramos señalizados con peligro de aludes en los que está prohibido detenerse en unos tramos concretos, ni siquiera para tomar fotos, por el elevado riesgo que hay. Se ve perfectamente la cima del Monte Tasman, de 3497 metros. A un ritmo constante, tardamos hora y cuarto en llegar hasta el punto más cercano que podemos estar.
En el camino, hay paneles de información sobre el retroceso del glaciar en los últimos 200 años, y cada 50 metros hay una señal que marca como ha ido desapareciendo, a causa del calentamiento global. Queríamos acercarnos al cercano Lago Matheson, famoso por su efecto espejo se tapa todo el cielo y empieza a llover. Desde el parking ubicado en la oficina de información hasta el lago hay 45 minutos a pie entre ir y volver, así que con la que está cayendo, desistimos.
Continuamos por la SH6 hasta Haast (125 km) y encontramos algunos puntos panorámicos espectaculares como el Knight Point y el lago Moeraki, y la que más nos impresiona, Bruce Bay.
La carretera SH6 se desvía hacia el interior y recorre el Mt Aspiring National Park y el desfiladero de Haast, pero es de noche así que imaginamos que es precioso. Estamos cansados y buscamos un lugar para dormir, y en la CamperMate nos señala varios campings del DOC. Encontramos uno al lado del río Haast y en la misma SH6. Allí nos quedamos, un lugar realmente bonito. El DOC es el Departamento de Conservación y gestionas zonas de acampada por todo el país.
Según la categoría de cada DOC, el precio por persona y día puede variar, en función de eso, las instalaciones son más o menos sencillas pero en todas hay baños, barbacoa con monedas y fregaderos. En este caso, al estar en mitad de la nada, este DOC no tiene depósitos para cambiar aguas ni vaciar el wc.
De Aspiring a Te Anau (306 km)
Empezamos el día visitando algunas zonas del P.N Aspiring de camino a Te Anau. Realmente, este DOC está en un lugar precioso. Tenemos todo el día por delante para llegar a Te Anau así que nos paramos donde nos apetece.
En las cascadas Thunder Creek Falls, las Fanfail Falls (las dos muy cerca de la carretera SH6 y de fácil acceso). Pasamos por la zona conocida como The Neck, el punto de unión con el lago Hawea, que esta vez nos queda a nuestra izquierda. En el lago hay un punto por donde pasa el paralelo 45 y continúa la carretera SH6 hasta el Lago Dunstan y Lowburn.
Hacemos una parada rápida en la Karawan Gorge, que sí merece la pena, y seguimos. Comentaros que según el contrato de la Campervan , teníamos que llegar desde Wanaka a Queenstown por la SH6, y no por una vía alternativa la Crown Range Road.
Llegamos a Queenstown poco antes del mediodía y lo primero que hacemos en pasar por la central de Britz para cambiar una pieza rota del depósito de agua que aunque no era grave, nos recomendaron pasar por el taller ya que se podía hacer al momento. Y allí mismo y de forma gratuita, aprovecharíamos para cambiar las aguas y limpiar el depósito.
Ya visitaremos con calma la ciudad al regreso del Milford Sound. La carretera que seguimos es la SH6 Scenic Route es espectacular. No se puede hacer con prisas porque cada dos kilómetros quieres parar.
Llegamos a Te Anau a las cuatro y media de la tarde. Estamos muy cansados y aunque no habremos hecho más de 300 km a lo largo del día, sí que llevamos muchas horas de camino y queremos parar. En Te Anau todos los campings son de pago y bastante caros por lo que preferimos pasar la noche en uno de los muchos DOCS ubicados en el FiorLand National Park.
Paramos en el primero, ubicado a 25 km del pueblo, llamado Henry Creek DOC y está ubicado a orillas del Lago Te Anau. Las tasas en este DOC son de 13 NZD por persona. nos acercamos al lago Te Anau, el lago más grande de la Isla Sur. Aquí disfrutamos de un atardecer precioso, uno de los más bonitos del viaje. Y una vez más en solitario.
Créditos de las imágenes: Por Nuria Pujol y Raimon Sánchez