5 plazas para viajar y 4 para dormir, techo elevable con sistema de inyección VEX, toldo exterior y portabicis con capacidad para tres bicicletas. Así es, en esencia, la nueva versión camperizada del modelo Tourneo por Tinkervan que Ford España puso a nuestra disposición durante varios días.
Un elegante vehículo en color gris (Moondust Silver) idóneo tanto para el uso diario como para disfrutar del fin de semana en pareja o en familia, con el que recorrimos la costa asturiana, desde la zona central hacia el occidente, disfrutando de sus bellos paisajes con el verde de prados y montes y el azul del mar como colores protagonistas. Un destino en el que disfrutar de mar, montaña, gastronomía, cultura y rincones únicos, en cualquier momento del año.
Al volante
La postura de conducción es parecida a la de un monovolumen convencional, con el asiento erguido, los pedales más bien cerca y la palanca de cambios seis velocidades muy a mano; asientos calefactados para un mayor confort en los meses invernales y un parabrisas con una excelente visibilidad en todos los ángulos, a lo que contribuyen también los retrovisores exteriores e, incluso, el interior según comprobamos en cuanto recorremos los primeros kilómetros antes de parar a repostar.
Nos incorporamos enseguida a la autovía A-66 en dirección norte, para enlazar después con la A-8 o autovía del Cantábrico en dirección oeste y comprobamos tanto la excelente maniobrabilidad y respuesta del motor Euro 6 en marchas largas, con un consumo moderado de carburante (un poco más elevado de la media que refleja el fabricante pero inferior a la misma versión sobre Euro 5 que habíamos probado meses atrás). Durante los días de la prueba el rendimiento en carretera estaría en torno a los 7 l/100 km, que se incrementaría a cerca de los 9 l/100 km en recorridos urbanos (es decir, algo más del 5 % de ahorro frente al motor anterior).
En ruta comprobamos también la tecnología del vehículo, similar a los más modernos turismos, con encendido automático de luces en túneles o cuando detecta poca visibilidad así como del limpiaparabrisas en caso de lluvia o humedad; limitador de velocidad; sistema auto-start-stop y sensores de aparcamiento a la hora de parar. En cabina destacamos también el innovador sistema SYNC, que permite la conexión del móvil y reproductores de música al vehículo, operado por control de voz, así como el sistema de audio de alta gama.
La Comarca Pixueta
Aunque la A-8 permite recorrer Asturias de oriente a occidente a buen ritmo, en una ruta turística nuestro interés es siempre disfrutar de distintas paradas para empaparnos de paisaje y paisanaje, y en este tramo recomendamos desviarse de la autovía para visitar, por ejemplo, Cudillero, llamada la «villa pixueta», un pintoresco pueblo de pescadores con un recoleto puerto (donde hay un aparcamiento al final perfecto para dejar el camper y recorrer la villa a pie), casas con las fachadas de colores que parecen colgadas los acantilados y estrechas callejuelas que invitan a perderse, para finalizar el paseo degustando un buen pescado en cualquiera de sus restaurantes.
Volvemos a la autovía y a poco más de 15 km nos desviamos hasta el pueblo de Castañeras (Novellana) para ver la bella playa de El Silencio y su entorno. Hay un aparcamiento donde debemos dejar el vehículo y seguir por un camino de tierra que hay hasta la playa (unos 10 minutos). Estamos en una zona paradisíaca, donde el tiempo parece haberse detenido, y la paz y el sonido de las gaviotas (sobre todo en estos meses de baja afluencia turística) son protagonistas.
Asturias occidental
De nuevo al volante y con una excelente respuesta del motor en velocidades cortas y largas, continuamos por la autovía rumbo al occidente. Si queremos seguir de visita podemos adentrarnos en la villa de Luarca o volver a tomar carreteras costeras para ver arenales como los de Cadavedo, La Riberona o La Cueva. Más adelante, en Otur hay también una bonita playa a la que en esos meses invernales se llega sin problema pero en los meses de verano hay que tener precaución ya que la carretera de bajada es estrecha y de doble sentido. A pocos kilómetros, la Reserva Natural de Barayo guarda un sistema dunar poblado de pinos detrás de la playa, perfecto, por ejemplo, para pararse a tomar unas fotos.
Seguiremos la autovía hasta su punto final, pasado el concejo de Tapia de Casariego, en las proximidades de Barres, donde tomaremos la N-634. Estamos en la zona más occidental de Asturias, y desde la carretera general vale la pena tomar el desvío a la derecha que nos lleva a la playa de Peñarronda, considerada monumento natural e idónea para la práctica de surf, con un buen aparcamiento.
Sin necesidad de volver a la carretera general podemos seguir entre verdes prados, conduciendo tranquilos hasta la cercana playa de Arnao, ya perteneciente a la villa de Figueras, con una zona recreativa al lado y un amplio aparcamiento para dejar el camper mientras damos un paseo y disfrutamos del espectacular entorno, con el puente de los Santos (que separa Asturias de Galicia) sobre la bella ría donde el Eo se abre al Cantábrico y el faro de Figueras nos sirve de guía.
Volvemos a la carretera nacional pasando por la localidad de Figueras y a pocos kilómetros merece la pena adentrarse también en la villa marinera de Castropol, imponente atalaya sobre el Eo que conserva un magnífico casco histórico. A sólo 7 km la N-634 nos lleva a Vegadeo, al pie de la ría del Eo, que cruzaremos y seguiremos por la carretera que lleva a Lugo hasta la localidad de San Tirso de Abres (a unos 12 km de Vegadeo), donde se ubica Amaido, el camping que nos servirá de alojamiento.
Concepto
La idea de Tinkervan a la hora de camperizar este modelo ha sido la de hacer una transformación lo menos invasiva posible en el concepto original. Así, en el interior, al que accedemos por un amplio portón lateral con peldaño de acceso, el asiento trasero de tres plazas se transforma, con un sistema de desplazamiento sobre raíles, en una cama de matrimonio de 1,90 x 1,45 m, quedando una segunda cama para los niños, si viajamos en familia, en el techo elevable.
A la hora de comer, ya con los asientos de nuevo en posición original, girando los asientos de la cabina (desde la posición más alta y con el freno de mano bajado), y extendiendo una mesa fija situada en la zona central (que en viaje irá plegada) se consigue una zona de comedor perfecta para los días fríos o para disfrutar de una buena sobremesa. Pero, si el tiempo acompaña, nada mejor que sacar una mesa exterior que permanece guardada en la parte trasera del vehículo (plegada verticalmente a la pared gracias a un imán) de cuatro patas que, acompañada de unas sillas plegables y extendiendo el toldo exterior Fiamma que se ha incorporado al vehículo, nos permitirá disfrutar de comidas y cenas al aire libre.
Aunque el modelo analizado no llevaba bloque cocina, frigorífico integrado ni aseo, Tinkervan ofrece la posibilidad de incluir este tipo de transformaciones, personalizadas y a petición del cliente. El vehículo probado dispone, además, de otros elementos de confort, como la iluminación interior a led, una calefacción estacionaria a gasoil, portabicis y un completo equipamiento eléctrico que incluye una batería auxiliar de AGM tracción de 80 Ah, tomas de 12 v (incluso una toma exterior con cable), tomas USB, etc.
Créditos de las imágenes: tomm/flickr.com
