Queremos compartir con vosotros la segunda aparte de nuestro viaje en autocaravana por Reino Unido e Irlanda. En el que nos adentramos en Irlanda y nos dirigimos hacia su capital, Dublín, recorriendo lugares como la abadía de Clonmacnoise y el complejo arqueológico de Bru ná Boinne. ¿Qué ver en Irlanda? Te invitamos a una aventura cargada de emoción y detalles que servirán de guía a otros viajeros que decidan recorrer el país en autocaravana o camper.
By Piki y Enrique Sierra.
¡Acompáñanos en la primera parte de esta aventura por Reino Unido!
DUBLIN
Fuimos a la región de los mil lagos, y pernoctamos en una preciosa arboleda en Glendalough. A la mañana siguiente visitamos la casa noble, cuando terminamos nuestra visita empezamos la ruta hacia Dublin, de camino pensamos parar a ver la mansión Powerscourt House.
Al aparcar nos dimos cuenta, de que en el cristal del parabrisas había una gran raja. No sabemos si es que en la ruta dio un guijarro, o si apareció el problema que ocasionó el perdigonazo de Puerto Lapice, así que mientras se iban a la casa, Enrique sacó cinta de la que siempre lleva, transparente y muy ancha y le hizo al cristal un «apaño» poniéndole cinta en vertical y después en horizontal tapando la raja, para que no creciera.
Ya nos pasó otra vez en Marruecos por el Sahara y el sistema dio muy buenos resultados. Pensamos continuar así hasta Inglaterra, pues ya nos quedaba muy poco tiempo en Irlanda.
Llegamos al P+R y al poco rato vino un vigilante para comprobar si habíamos pagado, miró y se fue para multarnos, a las dos autocaravanas, pero Dani se dio cuenta y salieron disparados él y Enrique para decirle que acabábamos de llegar, como era verdad.
Habíamos llegado tarde al P+R porque después de la mansión fuimos a una cárcel que se llamaba Killmainham donde estuvieron prisioneros los implicados en la lucha por la independencia irlandesa.
Al día siguiente por la mañana nos fuimos en autobús a recorrer Dublín. Nos sorprendió durante todo el viaje el precio de los desayunos en comparación con el de las comidas, son muy baratos e incluyen bacon, judías con tomate, huevos fritos y salchichas. Aunque nosotros preferimos leche y croissants.
Lo primero que vimos fue el monumento a la luz, una aguja altísima, La Spire que remplazó al monumento que había a Nelson, destruido por una bomba del Ira. La Spire es el monumento más alto del mundo, eso dicen allí.
En la misma calle está el edificio de Correos que fue donde se proclamó la independencia de Irlanda. Después el Trinity College en la Universidad, lo que nos interesaba era la biblioteca donde se encuentra el libro de Kells un manuscrito creado por monjes irlandeses hace 1.200 años, en realidad son cuatro libros que son los cuatro evangelios.
Pero, no pudimos verlos, una fenomenal cola nos podría tener de pie varias horas y aunque sea importantísimo lo que hay que ver, no aquí, sino en cualquier lugar, nos negamos a hacer colas.
En el Trinity también se puede apreciar el arpa que es el símbolo de Irlanda y las monedas de un euro la llevan grabada. No he dicho que en Irlanda de Sur la moneda es el euro y en el Ulster es la libra.
Muy cerca está la estatua de Molly Malone, que es todo un símbolo, de día vendía pescado y de noche era prostituta. Como había que comer nos fuimos al barrio del Temple Bar, lleno de gente, bares típicos y pubs, intentamos comer en el Temple Bar, pero imposible, estaba lleno hasta la bandera. El Temple bar tiene su fachada de color rojo, algo muy típico en los pubs y bastante fama. Por último fuimos a la catedral de San Patricios.
Después visitamos la segunda catedral de Dublín la de la Santísima Trinidad conocida como la de Cristo. Nos dirigimos al puente del medio penique porque yo no podía dar un solo paso más. Nos quedaron por ver los jardines y el Jeanie Johnston que era una copia de los barcos que llevaban los irlandeses a América. Damos unas cuantas vueltas para encontrar la parada del bus que nos devolvería al lugar de nuestra casa, ya casi de noche.
CLONMACNOISE
Una vez visto Dublin, tomamos rumbo a la abadía de Clonmacnoise y su conjunto monacal. Es monumento nacional, un icono de la iglesia católica celta, en el año 545 un monje fue el que se asentó y fundó el monasterio porque como otros monasterios eran cuna del conocimiento, que se dedicaron a escribir manuscritos, uno d ellos tan famoso como el libro de Dum Cow uno de los incunables más antiguos de Irlanda. Los vikingos y los anglonormandos la destruyeron en varias ocasiones, pero se volvió a reconstruir para que continuase la vida monacal.
Hoy día las ruinas la forman varias iglesias, una fortificación, varias cruces celtas, una catedral y sepulturas. Es un monumento muy visitado por su importancia en el Medievo Este complejo está situado cerca de Athone, donde vamos a un camping que nos costó 25 euros el precio a orillas de un lago, por ser fiesta lleno de autóctonos, un desastre.
El camping era una birria, ruidoso, sucio y mal distribuido. Al día siguiente fuimos a Kells donde vimos unas preciosas cruces gaélicas en la población de Atlhone.
BRÚ NA BÓINNE
Al día siguiente fuimos a visitar la que para mí fue la joya de la corona de lo que vi en Irlanda, Bru ná Boinne. Se trata de un complejo arqueológico anterior a Stonenhengen, durante 5000 años ha guardado secretos de la mente Neolítica, ocultos en las profundidades. Está situado al lado del rio Boyle y tiene más de 90 monumentos megalíticos, en un viaje por Irlanda en autocaravana no puede faltar este destino.
Los más espectaculares son Newgrange Krowth, y Dowth, para visitarlo se sacan las entradas en el Centro de Interpretación y hay autobuses que te llevan por el recinto. A nosotros el autobús nos llevó solo a dos tumbas, primero a una a la que no se podía acceder, y vimos por fuera una gran pirámide que parece rendir culto al sol Krowth tiene dos largos pasillos, rodeado por 18 estructuras más pequeñas. En otro autobús nos llevan a ver el siguiente túmulo.
Entramos a lo largo de un pasillo y nos encontramos con un dolmen. Se dice que fue un lugar de enterramiento para los reyes celtas. Cada año el 21 de diciembre, en el solsticio de invierno, un solo rayo de luz atraviesa el monumento a través de la ventana en la entrada al dolmen, hasta la cámara funeraria Hay una recreación donde la guía apaga las luces y vemos entrar el rayo de luz.
Quedé impactada, solo por ver lo que estaba viendo merecía la pena haber ido a Irlanda, aunque no hubiera visto nada mas, fue un impacto para mis sentidos, ¿cómo consiguieron en la época de la construcción semejante fenómeno? Después de la visita nos fuimos a dormir a Monasterboice al parking de una abadía ruinas.
BELFAST
Llegamos a Belfast y recorremos la ciudad después de aparcar en un parking céntrico. Hemos comido en un pub porque a Dani le apetecía comer un buen estofado Irlandés. Después, Dani sabia el teléfono de una señora que en su vehículo transporta turistas para enseñarle los murales, así que quedamos al día siguiente en el parking de la dirección que nos dijo, que era donde estábamos aparcados.
Belfast es la capital de Irlanda del Norte, fue donde se construyó el Titanic. Desde siempre ha contado con famosos astilleros los más importantes del mundo. La ciudad para mi es bastante fea y sin encanto el único lugar que me gustó fue un café antiquísimo y maravilloso donde nos llevó Dani con reservados y cristales preciosos.
Para la pernocta nos fuimos a un castillo que está a unos kilómetros, donde hay una zona para las autocaravanas con vistas al mar, un lugar tranquilísimo que se llama Donegll .
Al día siguiente fuimos a ver los famosos murales de Belfast con una guía. Y a las cuatro de la madrugada del día siguiente embarcamos para dejar la ciudad. La travesía duró dos horas y gracias a mis amigos pude sobrellevarla, porque tengo pánico al mar.
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